Algo tan sencillo como que los ciudadanos que lleven a un punto de reciclaje botellas de plástico, latas de metal, o papeles y que ese reciclaje voluntario les aporte unos descuentos en la factura de las basuras.
Desde la Mancomunidad de Aguas del Txingudi, ya se están aplicando estas bonificaciones para el que recicla los restos orgánicos. ¿Por qué no también con otros restos? No todo el mundo recicla, el beneficio es para todos, y es una manera de motivar a los bidasotarras a que reciclen.
En la última Asamblea de la Mancomunidad, nos abstuvimos en la votación de las tasas, aunque fuera una congelación, porque creemos que podemos promover el reciclaje invirtiendo en dispositivos que faciliten el reciclaje de otros cosas como las latas y las botellas de plástico. No inventamos nada. En países con tasas de reciclaje del 99% de su basura, ya se han tomado este tipo de medidas.
Hay gente muy concienciada y otros que no lo están. Pero lo que es innegable es que el reciclaje de unos pocos revierte en todos, y a mayor reciclaje, mayor beneficio. Por eso ponemos esta propuesta sobre la mesa, para que algo que en los países del norte de Europa se hace con normalidad, se instale en nuestra sociedad.